Con el sistema inmunológico, todo está claro. En cuanto a los efectos de una funda de almohada rancia en la piel, es la ropa de cama la que lleva la peor parte de su régimen de cuidado de la piel y el estado actual de su cabello. En pocas palabras, por mucha crema que te apliques en la cara antes de acostarte o por muy desordenado que tengas el pelo, de un día para otro la funda de tu almohada absorbe lo suficiente como para provocar acné subcutáneo e irritaciones cutáneas más adelante. ¿Has notado alguna vez que la mejilla que más toca la funda de la almohada por la noche tiene un aspecto especialmente feo? Si duermes de lado, claro.
Antes de lavarla, recuerde darle la vuelta a la funda de almohada; de lo contrario, la ropa de cama perderá rápidamente la saturación de color y la alta calidad del tejido.
También debes esperar a que la ropa de cama esté completamente seca para evitar doblar las fundas de almohada húmedas y así evitar el olor a humedad (créeme, hay gente que todavía piensa que esto es una molestia menor). Las bolsitas aromáticas y la ausencia de una bolsa de plástico para guardar la ropa blanca también pueden ayudar a combatirlo: en este caso, se garantiza que las fundas de almohada pierdan su último atisbo de frescura.
